Es lo que afirmó de manera tajante Robert Marín, padre de Robert Fabián Marín, el joven asesinado supuestamente por Gregorio Morales Macchi, alias Papo.
Marín repudió la disposición judicial para que Papo continúe alojado en la sede de la Dirección de Investigacion. «Un asesino debe estar en la cárcel y no gozar de tantos privilegios» dijo el señor Marin, para agregar que toda su familia murió en vida tras el asesinato de su hijo.
Agrego que su abogado solicitó la pericias de los celulares de su hijo y Chintia Burgos a la que considera cómplice del crimen.
Asi mismo manifestó el padre de Fabian, que su hijo llegó como pudo tras recibir los disparos a un centro asistencial donde a más se identificarse aún con cierta lucidez refirió a los médicos que lo asistieron, que el móvil del violento ataque pudo ser una desmedida reacción por celos.
