El Dr. Rubén Candia Amarilla, Fiscal General del Estado, brindó algunos detalles que atañen a lo ocurrido durante y después del secuestro de Cecilia Cubas, hija del entonces Presidente de la República, Raúl Cubas Grau, y de la forma en que se fue consolidando el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
«Tenemos que tener en cuenta que todo se ha iniciado dentro del marco de un movimiento político y partidario como lo fue Patria Libre para que posteriormente se pueda formar un grupo armado muy violento. En principio eran delincuentes pseudo políticos», expresó Candia en contacto con el programa Por el Imperio de la Ley de PDS Radio-TV Digital.
Candia Amarilla se refirió al manual que estipula cuáles son los principios del grupo y el comportamiento que deben tener sus integrantes: «Se tiene la modalidad de actuar con un manual de operatividad que fue incautado en el que se describe todos los comportamientos que deben realizar los componentes de estas organizaciones y del cual no escapa que tengan que ser adiestrados menores de edad».
«Se ha visualizado desde el comienzo, con gran eficacia, un modelo de delincuencia que todavía era totalmente desconocido para nuestro país y para las autoridades de seguridad de aquel entonces», agregó.
El mismo dijo que en su momento no se dimensionó el alcance del grupo hoy conocido como EPP: «La estimación que se tuvo sobre los primeros movimientos de este grupo de criminales como el atentado contra el Banco de Fomento de Choré, no fueron ponderados ni dimensionados, no se pensó que estarían unidos o arropados de una supuesta ideología que quisieron incorporarlo en otras actividades mucho más violentas como los secuestros».
«En aquella época este grupo se ha ido consolidando y durante eso pudimos realizar uno de los primeros juicios que llevó a la condena a los principales responsables que hasta hoy siguen adentro», dijo refiriéndose a Arístides Vera, Agustín Acosta, Basiliano Cardozo, Carlos Espínola, Gustavo Lezcano, Roque Rodríguez y Simeón Bordón, todos ellos declarados culpables del secuestro y muerte de Cecilia Cubas.
