Es lo que expresó Julio Godoy, abogado del futbolista Rodrigo “Popi” Muñoz, y agregó que su representado habría iniciado un acuerdo comercial en enero del 2015, con Pablo Eduardo Suárez y María José Arce de Suárez.
El letrado manifestó que su cliente mantenía una relación de amistad con el matrimonio, y por esa razón aceptó el proyecto inmobiliario con el “sistema pozo” que estaba en sus inicios, por lo que su cliente decidió invertir una gran suma por los departamentos que incluían cocheras, los mismos inmuebles debían ser entregados en noviembre del año 2016.
El Jugador Popi Muñoz, habría cancelado la suma total del inmueble al contado, pero jamás obtuvo el bien prometido, por lo que formuló la denuncia contra Pablo Eduardo Suárez y su esposa María José Arce de Suárez, en el año 2019. En ese momento se percatan que también habían estafado a dos jugadores más, Juan Manuel Salgueiro y Osmar Molinas.
Más fue la sorpresa de Muñoz cuando se entera que el inmueble se había vendido a otra empresa el, tamto el inmueble como el proyecto ya no pertenecian al matrimonio, agravando de esta manera la situación jurídica de los mismos con una doble estafa, con un perjuicio alrededor de 800 mil dólares, explicó el abogado Godoy.
Afirmó que desde marzo del año pasado se encuentran esperando la realización de la audiencia preliminar, que el matrimonio viene suspendiendo por medio de chicanas. Julio Godoy, indicó que el 20 de enero pasado se suspendió nuevamente la audiencia por séptima vez, por lo que consideran que detrás de la pareja estafadora estarían poderosos intereses, que los apañan y ayudan a dilatar el proceso, sentenció el abogado Godoy.