La jueza penal de garantías de Limpio, Elsa Idoyaga, informó que llamó para el 5 de marzo al procesado Rogelio Ferreira Martins, dueño de la curtiembre Waltrading SA, para la audiencia de imposición de medidas a fin de garantizar que el mismo se someta al debido proceso. En su momento, la fiscalía solicitó su prisión preventiva por la gravedad del hecho y peligro de fuga.
La fiscal Liza Martínez acusó a Rogelio Ferreira Martins por los supuestos hechos punibles de incumplimiento de medida de mitigación y obras hidráulicas sin autorización del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES). El mismo se expone a penas de hasta 8 años de pena privativa de libertad de acuerdo el marco penal.
La curtiembre que se encuentra a orillas de la laguna Cerro, ubicada en la compañía Piquete Cue de Limpio, es la responsable del fétido aroma que emana el cauce hídrico que se tiñó de rosado y provocó las quejas de los vecinos, según el análisis realizado por los personales del MADES. Además, sobre el lago se construyó sin autorización un terraplén que lo dividió en dos.
“Yo sigo con el problema de que no puedo tomar el 242 por una inconstitucionalidad planteada y estoy esperando la respuesta de la Sala Constitucional de la Corte, pero ya fijé audiencia del 242 debido a que si no hay ninguna medida cautelar de la Sala Penal, puedo tomar audiencia”, afirmó la jueza.
El padre del mismo, quien es su homónimo, se encuentra prófugo de la justicia paraguaya en Brasil y cuenta con orden de captura internacional código rojo tras ser procesado por una supuesta estafa que supera los 11 millones de dólares.
Se espera que la Sala Constitucional no se convierta en un nuevo obstáculo para que el proceso penal siga su curso. Recordemos que incluso ya se presentó la acusación contra el señor Martins y hasta la fecha no se pudo llevar a a cabo la audiencia de imposición de medidas cautelares.
