El Ministro de la Corte Suprema de Justicia, Alberto Martínez Simón, exigió a su colega Manuel Ramírez Candia, que le pida disculpas de manera pública o privada, luego de la acusación del segundo de que en la Corte existe injerencia política e injerencia de la masonería. Fue durante la sesión plenaria del día de ayer, en donde se dio un fuego cruzado entre los integrantes del alto tribunal.
“Tengo que aclarar que durante toda mi vida jamás hice vida política partidaria; nunca me afilié; nunca tuve intervención en ningún movimiento partidario ni en la época de facultad y colegio y mucho menos en la época que me cupo ser juez; nunca recibí instrucciones de nadie desde que llegué a la magistratura ni para dictar fallos judiciales, para resolver alguna cuestión administrativa”, refirió Martínez Simón.
“Creo que a mis colegas de la Corte, y puntualmente al ministro Ramírez Candia, le deben constar que siempre resolví las cuestiones, que llegaron hasta mi conocimiento y competencia, con un criterio jurídico y un criterio personal, pude estar equivocado o no, pero siempre fue propio por eso cuando me equivoco me equivoco yo solo y no porque alguien me pide”, añadió el ministro.
Agregó: “Jamás acepté que designaciones para cargos en el Poder Judicial o en la magistratura pasen por otro requisito que no sea la idoneidad y honestidad de los candidatos, mucho menos por algún presunto interés que algún grupo podría tener en esas designaciones y creo que el doctor Ramírez Candia recordará los casos en los cuales votamos en conjunto como muestra muy clara de que nunca me dejé influenciar por nadie”.
Dijo que “no le tembló el pulso en junio del año pasado cuando tuvimos que resolver, no solo las declaraciones juradas, sino la misma continuidad de ese juicio, y estuvo el doctor Ramírez Candia con otros tres miembros de la Corte, entre los cuales estaba yo resolviendo ese caso y asumiendo una posición principista”.
“Nunca me dejé influenciar y no voy a llegar a la Corte para empezar a hacerlo, no lo hice en 18 años de carrera y no voy a empezar ahora”, refirió Martínez Simón al evidenciar su molestia.
“Entiendo que puede ser que los proyectos personales del doctor Ramírez Candia no hayan fructificado, pero no quiero que busque excusas o explicaciones en imaginarios pactos políticos y mucho menos en influencias que pudieron tener sobre mi persona. Simplemente son consideraciones que tuvimos para optar democráticamente, cumpliendo la legislación, elegir un cuerpo de magistrados, ministros”. Añadió Martinez Simón.
“Por ello, quiero manifestar expresamente que no acepto la inclusión gratuita en el grupo de influenciables y no acepto las frases vejatorias como las que pronunció diciendo; Hombres nuevos con viejas prácticas», enfatizó.
Por su parte el Ministro Ramírez Candia se ratificó en todo y recordó que incluso presentó un escrito en donde señala la injerencia partidaria que se dio en la elección del nuevo presidente de la Corte, Doctor César Diesel.
Por su lado, el ministro Eugenio Jiménez Rolón apuntó que como brega por la autonomía del Poder Judicial, también brega por la autonomía de las personas, sean o no componentes del Poder Judicial.
“En los últimos días ha sido confusamente destacado que la Corte tiene nuevos hombres, pero que estos habían caído en antiguos vicios y sinceramente me desalienta porque yo soy uno de esos hombres. Me desalienta porque hecha por tierra los ingentes esfuerzos que hago por mejorar la administración de justicia”, apuntó Jiménez Rolón.
La ministra Gladys Bareiro, por su parte, pidió a sus colegas que señalen lo malo que hizo la Corte anterior y que en su caso particular le indiquen en que casos actuó mal.