El director de Procesos Electorales del Tribunal Superior de Justicia Electoral, Carlos María Ljubetic, explicó que la intención de varios sectores populares que buscan la doble acefalía en el Poder Ejecutivo para forzar elecciones a fin de elegir al nuevo presidente de la República, es inconstitucional.
«El presidente según la Constitución Nacional no es objeto de elección una vez que haya destitución, renuncia, fallecimiento o cualquier otro motivo. En ese aspecto la Constitución Nacional es bien concreta en la línea de sucesión», manifestó el directivo del TSJE.
El mismo indicó que existe una mala interpretación del artículo 234 de la Constitución Nacional y que las personas están “empecinadas en agregarle cuestiones imaginarias a la Constitución Nacional”.
“¿Qué parte de la Constitución dice que ante la ausencia del presidente debe hacerse una nueva elección? Eso ni siquiera se insinúa”, cuestionó Ljubetic luego de hablar de las intenciones de los manifestantes que pretenden la elección vía sufragio de un nuevo Jefe de Estado para culminar el periodo que le corresponde a Mario Abdo Benítez.
Ante la consulta de la doble acefalía, el mismo indicó que deberá asumir como nuevo jefe de Estado el presidente de la Cámara de Senadores y se llamará a elecciones para poder elegir al segundo al mando del ejecutivo.
La única forma de que un nuevo presidente sea electo es en caso de la ausencia del vicepresidente por fallecimiento o destitución y que, una vez electo al sucesor y asumido este la vicepresidencia, se le destituya al presidente y este sucesor tome el mando del Poder Ejecutivo, según explicó Carlos María Ljubetic.
No sería el primer caso de elecciones vicepresidenciales en el país, pues, en la historia ya consta lo ocurrido el 13 de agosto de 2000 feche en que fue electo Julio César «Yoyito» Franco tras el asesinato del político colorado Luis María Argaña.
En aquella ocasión, Luis Ángel González Macchi asumió la presidencia del país correspondiente al período constitucional 1998 – 2003 luego de la renuncia de Raúl Cubas Grau. Vale recordar que dicha asunción de Macchi fue considerada “ilegítima” por varios sectores políticos y populares.
“Podemos discutir durante años la legitimidad, pero la legalidad no podemos discutir porque la Constitución es demasiado clara”, sentenció.
