La Juez Alicia Pedrozo rechazó el pedido de permiso para trabajar y ratificó el arresto domiciliario del empresario Luis Augusto Montanaro Bedoya, procesado por lesión del derecho a la comunicación y la imagen por presumiblemente filtrar contenido sexual sin consentimiento en el marco del Operativo Duck Sex Games.
La defensa de Montanaro Bedoya solicitó el permiso a fin de que el procesado pueda ausentarse de su domicilio desde las 07:00hs hasta las 18:00hs de lunes a viernes. No obstante, la magistrada argumentó que no corresponde la autorización en atención a que de esa manera se «desnaturalizaría» la medida cautelar del arresto domiciliario impuesto al mismo.
“El pedido solicitado por la defensa es bastante amplia, ya que prácticamente solamente estaría cumpliendo con la medida del arresto domiciliario los días sábados y domingo, por lo que el fin del mismo de garantizar el sometimiento del mismo al proceso y evitar cualquier peligro de fuga u obstrucción no se estaría cumpliendo. Si bien es cierto nuestra Constitución Nacional ampara y protege el derecho al trabajo; no es menos cierto que esta Magistratura debe de velar por el buen cumplimiento de las medidas cautelares adoptadas según cada caso traído a su estudio y para su control” refiere la magistrada.
Resaltó además que en este caso la magistratura aún no ha sido informada sobre el embargo preventivo dispuesto en la presente causa con relación a la fianza real ofrecida a favor del imputado; por lo que en consecuencia la magistrada considera que no corresponde hacer lugar a la autorización para trabajar solicitada por los representantes de la defensa técnica. En atención a ello, resolvió mantener el arresto domiciliario para el empresario.
La Fiscal de Delitos Informáticos Ruth Benítez presentó imputación contra Luis Augusto Montanaro Bedoya (40) por la supuesta comisión del hecho punible de lesión del derecho a la comunicación y a la imagen, en el marco del Operativo “Duck Sex Games”. Tras el operativo se obtuvo la detención del conocido empresario que filmaba actos sexuales y los vendía sin consentimiento.
La causa inició a partir de la denuncia de una de las víctimas, que tomó conocimiento de que sus fotografías de índole sexual, explícitas, tomadas con el empresario, se encontraban siendo comercializadas a través de la web. Se realizó un allanamiento en el domicilio del sindicado, se logró la incautación de varios elementos que dan cuenta de la existencia del hecho punible y no se descartan otras figuras penales a partir de lo que se encuentre en el contenido tanto del aparato celular como de la computadora, confiscadas del poder del mismo.
