La Cámara de Apelación confirmó la resolución que elevó a juicio oral la causa contra el presidente del club Resistencia, Roberto Garcete Cano y del padre de este y actual vicepresidente, Roberto Garcete Rodríguez, acusados por supuesto lavado de dinero y otros. Según la acusación fiscal, estas personas habrían formado parte del esquema de usura y lavado de dinero de Ramón González Daher, condenado a 15 años de prisión.
La defensa de Roberto Damián Garcete Rodríguez y Roberto Alejandro Garcete Cano sostiene que la acusación carece de fundamento suficiente y que el proceso está viciado por la falta de precisión en los hechos atribuidos a sus representados. Argumentan que la imputación presentada por el Ministerio Público no especifica con claridad la participación individual de cada acusado, violando así el derecho a la defensa.
Además, insisten en que los hechos investigados ocurrieron entre 2013 y 2015, por lo que, según el Código Penal, la acción penal ya habría prescrito en 2020. También critican que el juez de primera instancia desestimó sin justificación varios incidentes presentados, incluyendo la inclusión de pruebas documentales y testigos que, según la defensa, podrían demostrar la inocencia de los acusados.
La Fiscalía sostiene que los imputados habrían utilizado un esquema de préstamos irregulares, resultando en la transferencia de un inmueble mediante maniobras financieras presuntamente fraudulentas. La defensa, por su parte, argumenta que el caso está prescrito y que no se ha demostrado una conducta ilegal por parte de los acusados. El fallo también destacó que el juez de primera instancia fundamentó correctamente su decisión y que no se presentaron agravios suficientes para revertirla. Con esta resolución, el caso avanza hacia la fase de juicio oral y público, donde se determinará la responsabilidad o no de los acusados.
