La Juez de Garantías Diana Carvallo elevó a juicio la causa contra Eduardo Suarez y María José Arce de Suarez, acusados por presunta estafar en perjuicio 3 exjugadores de fútbol profesional a través de la venta y construcción de departamentos. Las víctimas son Rodrigo “Popi” Muñoz, Osmar Molinas y Juan Manuel Salgueiro.
Inicialmente Rodrigo “Popi” Muñoz inició la negociación con la pareja acusada, en torno a una propuesta de negocios a principios del 2015, que consistía en la adquisición de departamentos mediante el “sistema pozo”.
Por su parte Osmar Molinas, adquirió una unidad de departamento con cochera, en ese mismo año, pero el desarrollo inmobiliario jamás termino la construcción que ni siquiera contaba con aprobación de la Municipalidad según comentó. A raíz de esta situación presentaron una demanda civil por incumplimiento de contrato, pero en el transcurso del proceso se dieron cuenta de que fueron estafados, por lo que llevaron el caso a una denuncia penal por presunta estafa.
Según datos de la investigación, este proyecto inmobiliario estaba sujeto a 20 meses. El matrimonio compuesto por Pablo Eduardo Suárez y María José Arce de Suárez, presentó un proyecto de edificios que no contaba con la aprobación municipal requerida, pero contaba con garantías en caso de incumplimiento de las cláusulas del contrato, los mismos comenzaron la ejecución del proyecto pero por el camino abandonaron las obras debido a la falta de capital, por lo que para continuar las obras, buscaron nuevos inversores, motivo por el cual decidieron vender y transferir el edificio sin dar aviso a los futbolistas.
La estafa ronda los 800 mil dólares y las víctimas abonaron al contado la totalidad de lo requerido para dicho proyecto.