El fiscal General del Estado, Emiliano Rolón presentó ayer el desistimiento de la inconstitucionalidad planteada por su antecesora Sandra Quiñónez, a fin de evitar que la Contraloría General de la República audite el Ministerio Público.
Rolón habló de la necesidad de desistir de la acción de manera que “se destrabe el tema, para que la política de puertas abiertas y transparencia sea real en el Ministerio Público”, tal como lo anunció en su postulación al cargo.
Dicha acción contaba con una medida cautelar que impedía que la Contraloría ingresar a la Fiscalía, puesto que Quiñónez pretendía que sea un Tribunal de Cuentas el que haga la revisión de la ejecución presupuestaria.
Rolón reafirmó que la Contraloría tiene la misión constitucional de ejercer control y que el Tribunal de Cuentas tiene una tarea distintas, que es la de juzgar.