Mónica Castañe, madre de Belén Whittingslow, vuelve a encadenarse frente al Poder Judicial para exigir a la Corte Suprema de Justicia que resuelva la acción de inconstitucionalidad planteada en contra de la orden de captura emitida contra su hija, quien actualmente se encuentra refugiada en Uruguay.
El 30 de diciembre del 2022, la mujer ya se había encadenado en el mismo lugar, en la explanada del Poder Judicial. En esa ocasión, luego de 12 urgimientos y a más de 3 años de haberse presentado la acción de inconstitucionalidad contra la orden de captura de Belén Whittingslow, en el proceso conocido como “compra de notas”, la Sala Constitucional había dado trámite a la acción presentada y ahora se estudia el fondo de la cuestión, cuya resolución ahora aguarda Castañe.
Whittingslow solicitó refugio en Uruguay, considerando que el proceso en su contra fue un montaje que pretende encubrir otros hechos como la denuncia de acoso que había hecho contra el profesor de la Universidad Católica, Cristian Kriskovich y que tuvo su corolario en esa resolución ilegal, según el abogado defensor Rodrigo Cuevas.
De esta manera, recién ahora la máxima instancia judicial se dignó a mover el expediente, después de año de haber cajoneado la acción y tras la decisión de la madre de Belén, Mónica Castañé, quien se encadenó frente al Palacio de Justicia de Asunción.
“Venimos a apurar a que se resuelva la acción de inconstitucionalidad, ya habíamos pedido que se habiliten los plazos en enero, sin embargo, los ministros están peleando por carguitos, vengo a pedir justicia, que se dejen de hacer las fantochadas que están haciendo y que cumplan con su deber de impartir justicia”, dijo Castañe.