La Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), en coordinación con el Ministerio Público, desarticuló una estructura criminal dedicada al tráfico de marihuana tipo Skunk, droga de alta potencia y valor en el mercado, que abastecía al Clan Rotela en el departamento Central.
La operación se concretó mediante tareas de inteligencia y vigilancia que permitieron interceptar a cuatro personas involucradas en la red delictiva. Dos de ellos, identificados como Liz Karina Ocampos y Otto Rafael Agusti, fueron detenidos tras viajar desde Pedro Juan Caballero en un bus de larga distancia con un cargamento de Skunk. La entrega debía realizarse en la zona del Parque Guasu Metropolitano, donde los esperaban Diego Ramón López, presunto líder del grupo y su cómplice Juan Carlos Aguilera, quienes se encontraban en un automóvil.
La intervención fue ejecutada en el momento en que se concretaba el encuentro para la entrega, permitiendo a los agentes detener a todos los involucrados y asegurar la droga transportada. El procedimiento estuvo a cargo del fiscal antidrogas Martín Morínigo, quien destacó la precisión de la operación basada en vigilancia encubierta y monitoreo de movimientos entre ciudades.
La marihuana tipo Skunk, conocida por su elevado contenido de THC y su aroma penetrante, ha experimentado un auge significativo en el mercado en el territorio nacional. Su valor en el mercado ilegal se aproxima al de la cocaína, lo que la convierte en una sustancia altamente codiciada por organizaciones criminales.
Desde el año pasado, la SENAD ha intensificado las acciones contra el cultivo y tráfico de esta variedad, desmantelando viveros clandestinos e incautando cargamentos en distintas partes del país. Las autoridades advierten que su circulación representa una nueva amenaza dentro del narcotráfico, ya que su potencia y precio elevan tanto los riesgos sanitarios como la violencia asociada al control de territorios.
